21 de mayo de 2013

La belleza está en el exterior

Stoker (2013) es una película estadounidense dirigida por Park Chan-Wook que cuenta la historia de India Stoker (Mia Wasikowska), una joven que con motivo del funeral de su padre recibe la visita de su tío Charles (Matthew Goode), a quien nunca antes había visto. Charles decide quedarse un tiempo a vivir con India y su madre Evelyn (Nicole Kidman) para cuidar de ellas tras el trágico acontecimiento.

El debut de Park Chan-Wook en Hollywood; vino, vio y venció. Sin perder la esencia que caracteriza a este director surcoreano, Stoker se presenta como una de esas películas que duran lo necesario, lo que la historia demanda. Un largometraje que, aunque no cuenta con un guión tan original como el de sus anteriores producciones, sí que es original en lo que se refiere a los elementos que la estructuran y acompañan.

Stoker envuelve al espectador en su propia atmósfera, que la diferencia de esas otras películas de Hollywood que parecen casi un producto industrial y en las que el director es un simple realizador. Esa atmósfera es fruto de una conjunción, quizás no perfecta, pero sí única, entre música y estética. Con un montaje en el que los planos se entrelazan de manera casi artística para evocar situaciones pasadas que nos dan otro punto de vista de los acontecimientos.

A lo largo de la película se observan pequeños detalles que definen a cada uno de los personajes y sus relaciones. La más importante de esas relaciones la representa el binomio protagonista que forman India y su tío "Charlie", él la busca constantemente y ella se escabulle, al mismo tiempo que siente curiosidad por saber qué quiere de ella y quién es su tío realmente.


Stoker tiene un poco de casi todo lo bueno que se le puede pedir a una película. Es un thriller/drama en el que destaca más la vertiente estética que la historia en sí, que plantea un contraste entre lo familiar y lo desconocido con algunos toques de violencia, partiendo siempre de las características propias del autor.

Nota: 7'5/10.

P.D.: Como curiosidad, en una de las escenas de la película India aparece leyendo La vida de Pi, novela en la que está basada la película homónima que dirigió Ang Lee el año pasado. Y que es un poco cursi, aunque eso no es curiosidad, es opinión.

1 comentario:

  1. Esta película te reconcilia con el buen cine.
    De las que puedes tener grabadas y recrearte en escenas sueltas de vez en cuando.
    Jambodic.

    ResponderEliminar